NIGHTINGALE & CO
Nightingale&Co es un blog de carácter personal, formado por un grupo de profesionales sanitarios preocupados por el cuidado integral de las personas, y cuyo compromiso se centra en aportar una visión reflexiva donde la experiencia y los diferentes puntos de vista de los profesionales implicados en los cuidados, puedan servir para mejorar la calidad en la asistencia profesional basada en la evidencia.

Infecciones nosocomiales en UCI (parte I)

Escherichia coli Bakterium

Las infecciones nosocomiales (IN) constituyen un importante problema de salud pública, por la morbilidad y mortalidad que ocasionan, pero también por el coste económico y social que suponen. En el ámbito médico, se denomina «infección nosocomial» (del latín nosocomium, hospital de enfermos) a la contraída por pacientes ingresados en un recinto de atención a la salud (no sólo hospitales).

En términos generales, se define infección nosocomial (IN) como toda infección que se adquiere y se manifiesta en un paciente después de 48-72 horas de haber ingresado en el centro hospitalario, sin previa incubación de dicha patología o dentro de las 48-72 horas de su egreso hospitalario, acompañada, según algunos autores, de cultivos positivos de un líquido corporal estéril (sangre, líquido pleural, LCR, etc.) y uso de antibióticos por más de 72 horas.

La OMS define a la infección nosocomial (IN) como: Una infección contraída en el hospital por un paciente ingresado por una razón distinta de esa infección. Una infección que se presenta en un paciente ingresado en un hospital o en otro establecimiento de atención de salud en quien la infección no se había manifestado ni estaba en período de incubación en el momento del internado. Comprende las infecciones contraídas en el hospital, pero manifiestas después del alta hospitalaria y también las infecciones ocupacionales del personal del establecimiento.

Según el CDC, para considerar una infección como nosocomial, no deben existir pruebas de que la infección estuviera presente o incubándose en el momento del ingreso del paciente en el centro sanitario. Las infecciones nosocomiales pueden se producidas por agentes infecciosos procedentes de fuentes endógenas o exógenas:

  • Las fuentes endógenas son los lugares del cuerpo, como la piel, nariz, boca, aparato digestivo o vagina que habitualmente están colonizados por microorganismos.
  • Las fuentes exógenas son aquellas que son externas al paciente, tales como el personal que atiende al paciente, los visitantes, el equipamiento para atender al paciente, instrumentos médicos o el entorno sanitario.

Las infecciones nosocomiales son las complicaciones más comunes en pacientes hospitalizados. Aproximadamente una cuarta parte de estas infecciones ocurren en pacientes ingresados en Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), aunque los Cuidados Intensivos no sean más que un 10% de la camas hospitalarias. Afectan al 5% de los pacientes y comportan una elevada morbimortalidad y un mayor coste económico. La infección nosocomial (IN) es, tanto por su frecuencia como por su impacto, uno de los efectos adversos (EA) de mayor importancia, tal como muestran los sistemas de notificación nacionales o de otros países.

Los principales tipos de infección relacionada con la asistencia sanitaria están relacionados con procedimientos invasivos y son la infección respiratoria, la quirúrgica, la urinaria y la bacteriemia de catéter vascular. La vigilancia epidemiológica, entendida como la recopilación de información para emprender una acción, es la base de los programas de control de infección. Estos han evolucionado desde una vigilancia global de la infección nosocomial a una vigilancia dirigida a procesos relacionados con la prevención y a indicadores (tasas) de infección nosocomial. La comparación de estos indicadores puede ser de utilidad en el establecimiento de medidas de prevención.

La publicación en el año 2000 por el Institute of Medicine (IOM) de To Err is Human: Building a Safer Health System identificó la infección nosocomial como uno de los principales problemas de salud pública y enfatizó la importancia de implantar sistemas de prevención de las infecciones nosocomiales para mejorar la calidad asistencial en los centros sanitarios.

Tipos de vigilancia

El sistema de vigilancia debe ser :

  • Global (de todo el centro).
  • Parcial (para determinadas áreas, servicios o localizaciones de la infección).
  • Orientado a objetivos (enfocado a determinadas intervenciones o procedimientos).

1. Vigilancia global del Hospital.

a) Sistema de alerta epidemiológica de la infección, detección de brotes.

  • Los brotes epidémicos pueden producir una notable morbilidad y mortalidad. Sus causas son múltiples, aunque la mayoría están producidos por microorganismos multirresistentes. La detección temprana de los microorganismos resistentes y el inmediato aislamiento de los enfermos infectados o colonizados son fundamentales para evitar la extensión de muchos brotes. El respeto riguroso de las normas preventivas en las unidades de alto riesgo (UCI, Hematología,…) es una medida primordial para su vigilancia, prevención y control. Todos los hospitales definirán un sistema de alerta epidemiológica, que permita detectar brotes y microorganismos específicos.
  • Hay definida una la lista de microorganismos de alerta, que suele estar compuesta por aquellos gérmenes y patologías que conlleven la puesta en marcha urgente de medidas de aislamiento, estudio de portadores y contactos.

    La lista de microorganismos de alerta incluyen:

    • Staphylococcus aureus resistente a meticilina (SARM), S. aureus con sensibilidad disminuida a glicopéptidos.
    • Streptococcus pyogenes en infección quirúrgica: fascitis necrotizante.
    • Enterococos resistentes a vancomicina, alto nivel de resistencia a aminoglucósidos o resistentes a peni/ampicilina.
    • Clostridium difficile.
    • Enterobacterias con patrones anormales de resistencia:- Resistencias a cefalosporinas de 3ª, carbapenemas, aminoglucósidos (especialmente en Klebsiella, Enterobacter, Serratia).

    – Seguimiento específico de B-lactamasas de espectro extendido (BLEE).

    • Pseudomonas resistentes a cefalosporinas de 3ª y 4ª generación, carbapenemas y aminoglucósidos.
    • Acinetobacter multirresistente.
    • Mycobacterium tuberculosis (especial atención para detección de cepas multirresistentes).
    • Aspergilosis y otras micosis invasivas (por hongos filamentosos).
    • legionella.
    • Otros gérmenes multiresistentes oportunistas no habituales.

– Brotes hospitalarios de cualquier etiología.

b) Estudios globales de la infección asociada a la asistencia sanitaria en el hospital.

Se recomienda que todos los hospitales realicen un estudio de prevalencia al año. El EPINE es un estudio consolidado, se procederá a su realización en todos los centros como estudio de prevalencia anual.

2. Vigilancia parcial.

Deberá contar con un sistema de alerta epidemiológica que permita detectar brotes y además organizará la vigilancia de determinadas áreas, servicios o localizaciones de la infección.

2.1. Infección en UCI.

Actualmente casi todas las Unidades de Cuidados Intensivos de nuestro país participan en el proyecto ENVIN. Según el protocolo de este estudio, los pacientes objeto de vigilancia son todos los ingresados en UCI durante un periodo mínimo de 3 meses al año. Las infecciones controladas se relacionan de forma directa con factores de riesgo conocidos y/o que se asocian con mayor morbilidad y mortalidad entre los pacientes críticos como las infecciones urinarias relacionadas con sonda uretral (IU-SU). Los criterios de definición de estas infecciones son los publicados por el CDC.

3. Vigilancia por objetivos.

Enfocada a determinadas intervenciones o instrumentos. Se recomienda que los hospitales con un mayor nivel de servicios especializados establezcan sistemas de vigilancia y produzcan indicadores selectivos para instrumentaciones e intervenciones de mayor riesgo.

Registros y los sistemas de vigilancia

El registro ENVIN fue desarrollado en el seno de Grupo de Trabajo de Enfermedades Infecciosas de la SEMICYUC) en el año 1994. Su objetivo era y es, registrar las infecciones relacionadas con el uso de dispositivos desarrollados durante la estancia de los pacientes en UCI. Para ello, se diseñó una base de datos que ha ido evolucionando a lo largo de los años. Actualmente la recogida de datos se realiza utilizando la aplicación informática ENVIN- HELICS que está ubicada en un servidor web y a la cual se accede mediante Internet en: http://hws.vhebron.net/envin-helics/

El acceso es libre (utilizando un código individual) y gratuito previa identificación y registro de los responsables de cada UCI.

La participación en el registro es voluntaria y la recogida de datos es longitudinal y prospectiva. Desde su inicio la incorporación de UCI ha ido en aumento llegando en el año 2009, a aportar datos de 147 UCI. El programa dispone de una versión simplificada que permite incluir solo los pacientes con alguna de las infecciones controladas (ENVIN-HELICS simplificado), lo que ha facilitado que cada vez más UCI realicen un registro continuo de sus infecciones.

A partir de los datos del Estudio de Prevalencia de Infección Nosocomial en España (EPINE) que se realiza desde hace más de quince años, y del Point Prevalence Study, efectuado en diversos países de Europa durante el año 2010, se estableció que alrededor del 7% de los pacientes hospitalizados presentaron una infección relacionada con la asistencia durante el corte de prevalencia, estimándose que alrededor del 5% de los pacientes hospitalizados desarrollaban una infección nosocomial durante el ingreso.

La larga serie de resultados del EPINE y el estudio europeo han permitido identificar tendencias importantes en la frecuencia y en los focos de la infección nosocomial en nuestro entorno. Si bien hasta hace algunos años la infección del tracto urinario era la infección nosocomial identificada con mayor frecuencia, en los cortes de prevalencia en la actualidad es la infección del tracto respiratorio, seguida de la infección de localización quirúrgica en el estudio europeo y la urinaria en el estudio español.

En general, estas infecciones están relacionadas con procedimientos asistenciales invasivos: la infección urinaria nosocomial con el cateterismo urinario, la infección quirúrgica con el procedimiento quirúrgico, la infección respiratoria con la ventilación mecánica invasiva y la bacteriemia de catéter con el cateterismo vascular. Todas ellas tienen en común la disrupción de las defensas propias del huésped por un dispositivo o una incisión, permitiendo la invasión por parte de microrganismos que forma parte de la flora habitual del paciente (flora endógena), flora seleccionada por la presión antibiótica selectiva (flora secundariamente endógena), o flora que se halla en el entorno hospitalario inanimado (flora exógena).

El proyecto EPINE (Estudio de Prevalencia de las Infecciones Nosocomiales en España), iniciado en 1990, realiza una encuesta de prevalencia para detectar infecciones nosocomiales, una vez al año, en todos los hospitales de enfermos agudos que de forma voluntaria aceptan su participación.

El grupo de trabajo de enfermedades infecciosas de SEMICYUC presentó los datos del ENVIN 2012 (Estudio Nacional de Vigilancia de infección Nosocomial en Servicios de Medicina Intensiva), donde se obtuvieron las tasas de infección más bajas desde el inicio de este registro. El registro ENVIN es la base de los proyectos intervencionistas realizados a nivel nacional: Bacteriemia Zero, Neumonía Zero y Resistencia Zero.

En los últimos años, y con el inicio de los proyectos de intervención ya citados anteriormente, se ha observado una clara disminución de las infecciones.  Los pacientes que han adquirido alguna infección en la UCI, han descendido paulatinamente desde el 15,51 por ciento de 2009 hasta el 11,30 por ciento de 2010, el 10,98 por ciento de 2011 y el 10,24 por ciento de 2012. Tan sólo el 6,16 por ciento de pacientes ingresados en 2012 sufrieron una complicación debida a neumonía, infección urinaria y bacteriemia, las infecciones asociadas a dispositivos controladas por ENVIN.

Bibliografía:

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  • Lisboa T, Rello J. Prevención de infecciones nosocomiales: estrategias para mejorar la seguridad de los pacientes en la Unidad de Cuidados Intensivos. Med Intensiva. 2008;32(5):248-52.
  • Pujol M, Limón E. Epidemiología general de las infecciones nosocomiales. Sistemas y programas de vigilancia. Enferm Infecc Microbiol Clin. 2013;31(2):108–113.
  • OMS. Prevención de las infecciones nosocomiales. Guía Práctica. WHO/CDS/CSR/EPH. 2002. Disponible en: http://www.who.int/csr/resources/publications/ES_WHO_CDS_ CSR_EPH_2002_12.pdf
  • Grupo de Trabajo de Enfermedades Infecciosas de la SEMICYUC (GTEISEMICYUC). Estudio Nacional de Vigilancia de Infección Nosocomial en UCI (ENVIN-UCI). Informe de la evolución de la incidencia y características de las infecciones nosocomiales adquiridas en Servicios de Medicina Intensiva (1994-2001). Madrid: Jarpyio Editores SA.; 2002.
  • García-Velasco S, Sánchez MD, Torres R, García E, Álvarez ML. Control de la infección por Acinetobacter Baumannii multirresistente en una UCI Polivalente. Metas de Enfermería oct 2004; 7(8): 55-58.
  • Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad, La Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias y la Sociedad Española de Enfermería Intensiva y Unidades Coronarias. Protocolo de prevención de las neumonías relacionadas con ventilación mecánica en las UCI españolas. Neumonía Zero. Madrid: Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad; 2011.
  • Sánchez Crespo M, Martínez Martín ML, Martín Salinas C, Rincón del Toro T. Neumonía asociada a ventilación mecánica. Influencia de la aplicación de medidas enfermeras preventivas en pacientes críticos. Metas Enferm 2013; 16(10): 14-19.
  • Palomar M, Rodríguez P, Nieto M, Sancho S. Prevención de la infección nosocomial en pacientes críticos. Med Intensiva. 2010;34(8):523–533.
  • Lisboa T., Rello J.. Prevención de infecciones nosocomiales: estrategias para mejorar la seguridad de los pacientes en la Unidad de Cuidados Intensivos. Med. Intensiva [revista en la Internet]. 2008 Jul [citado 2015 Ago 11] ; 32(5): 248-252. Disponible en: http:// scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0210-56912008000500006&lng=es
  • Lorenzo Numancia O. Revisión de las principales medidas de prevenicón de infecciones nosocomiales en las unidades de cuidados intensivos (UCI). Trabajo fin de Grado. Zaragoza, 2012. Disponible en: http://invenio2.unizar.es/record/7323/files/TAZ-TFG-2012-154.pdf
  • Revert Gironés C. Estudio epidemiológico de la infección nosocomial en el servicio de UCI del Hospital Universitario de Canarias. Tesis doctoral. Curso 2004/05 CIENCIAS Y TECNOLOGÍAS/11 I.S.B.N.: 84-7756-640-2. Disponible en: http://tesis.bbtk.ull.es/ ccppytec/cp217.pdf
  • Santalla A, López MS, Ruíz MD, Fernández J, Gallo JL, Montoya F. Infección de la herida quirúrgica. Prevención y tratamiento. Clin Invest Gin Obst. 2007;34(5):189-96 1.
  • Páginas consultadas:http://www.semicyuc.org/temas/calidad/bacteriemia-zero/la-tasa-de-infeccion- nosocomial-en-uci-al-minimo-historico

    http://ocw.unican.es/ciencias-de-la-salud/medicina-preventiva-y-salud-publica/materiales- de-clase-1/TEMA35_INFECCION_HOSPITALARIA.pdf

    http://semicyuc.org/temas/investigacion/registros/envin

    http://www.elsevier.es/es-revista-enfermedades-infecciosas-microbiologia-clinica-28- articulo-sesion-7-enfermeria-infeccion-nosocomial-13037033

    http://sanitariacarbula1.blogspot.com.es/2008/02/infecciones-nosocomiales.html http://www.intramed.net/contenidover.asp?contenidoID=86665


Calculando el ritmo de una perfusión.

El cálculo del ritmo de un suero o una medicación mientras trabajamos es una tarea cotidiana.

En esta entrada quiero repasar los cálculos que hacemos para programar el ritmo de infusión en tres casos muy concretos, ayudándome de situaciones frecuentes:

  1. ml/h.
  2. gotas/min.
  3. mcg/Kg/min.

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De izquierda a derecha SSF 0,9% 50ml, 100ml, 250ml, 500ml

  1. Cálculo de ritmo en ml/h:

Captura de pantalla 2016-02-13 a las 23.59.33

Imaginemos que hay que administrar 2.000 ml de suero glucosado al 5% en 24 h.

Para convertir esta pauta en ml/h dividimos el volumen total entre el tiempo de administración:

2.000 ml/24 h = 83,3 ml/h

En la bomba de perfusión programaremos un ritmo de 83.3ml/h.

2. Cálculo de ritmo en gotas/min:

Cuando se utilicen dispositivos de goteo simples que no incorporen sistemas de flujo en ml/h, deberemos convertir la expresión de ml/h a gotas/min:

Para ello es necesario conocer las siguientes equivalencias:
 1 ml = 1 cc = 20 gotas = 60 microgotas

Siguiendo con el ejemplo anterior si tenemos que administrar 2000ml en 24h (2000ml/24h = 83ml/h) Por tanto:

1ml –> 20 gotas

83 ml/h –>   x gotas

X = 1.660 gotas en 1 hora.

Si 1.660 gotas debían pasar en una hora, para calcularlas en minutos será:

1660 gotas –> 60 min.

X gotas –> 1 min.

X = 27,6 gotas/min.

3. Cálculo de ritmo con dosis expresadas en mcg/Kg/min:

En otras ocasiones la pauta viene expresada en unidades de masa (mcg) por unidades de peso (Kg), esta dosis de medicación administrada en un tiempo determinado determina el flujo de la perfusión.

La dopamina es un fármaco que varía su efecto en función de la dosis.

Imaginemos que se decide administrar dopamina a dosis de 5μg/kg/min (dosis β1 cardiaca) a un paciente con insuficiencia cardiaca descompensada.

Calcular la velocidad de infusión para alcanzar la dosis mencionada, teniendo en cuenta que la mezcla se prepara con una ampolla de dopamina (200mg/5ml) y 250 ml de SG5% y se cuenta con bomba de infusión. El paciente pesa 70kg.

Captura de pantalla 2016-02-13 a las 23.24.33

 

Estos problemas pueden resolverse de varias formas:

Como se cuenta con bomba de infusión y la velocidad se va a expresar en ml/h, calcular cuántos μg debe recibir el paciente en una hora:

Lo primero es convertir a unidades más manejables, pasando de microgramo a miligramo:

5μg / 1000 = 0.005mg

5μg/Kg/min –> 0.005mg x 70Kg =0.35 mg kg min

Para programar la bomba de infusión necesitamos saber los ml/h por eso pasamos los minutos a horas haciendo una regla de tres.

0.35 mg –> 1 min

x mg   –> 60min

x = 0.35 x 60 = 21mg/1 h.

Hemos conseguido saber que tenemos que administrar 21mg de dopamina en 1 hora pero no sabemos cuantos mililitros equivale de nuestra dilución, debemos saber cuantos ml/h tenemos que programar en la bomba de infusión.

Llegados a este punto recuerdo que la dilución son 200mg de dopamina en 250 ml de SSF haciendo una regla de tres.

200mg –> 250ml

21mg –> x ml

x = (21 x 250) / 200 = 26.25ml

La bomba la tenemos que programar a 26ml/h.

Esta forma es correcta pero muy lenta y poco práctica en nuestro día a día, necesitamos agilidad, por eso hay una forma más rápida, siguiendo con el ejemplo anterior.

Calculamos el inverso de la concentración = 250ml/200mg –> 1.25

5μg/Kg/min –> 0.005mg x 70kg x 60min x 1.25 = 26.25 ml/h (efecto β1 cardiaco)

Imaginaros que nos piden aumentar el ritmo a 8μg/Kg/min, usando la fórmula anterior:

0.008mg x 70kg x 60min x 1.25 = 42ml/h (efecto α1)

Resumen de la perfusión de dopamina 200mg/250ml:

Repitiendo los cálculos anteriores para las diferentes dosis de la dopamina obtenemos a que ritmo debemos programar la bomba para conseguir el efecto deseado.

Recordar que los ritmos de infusión son para un concentración de 200mg/250ml, para otras concentraciones habría que recalcular el ritmo.

Captura de pantalla 2016-02-14 a las 0.02.07

 

En otro paciente con una dilución de noradrenalina 40mg/250ml y peso 70kg queremos mantener un ritmo de infusión de 5mcg/min, se pide pasar a ml/h.

Captura de pantalla 2016-02-13 a las 23.41.05

En este caso la dosis de la noradrenalina no está en función del peso del paciente, pero podemos usar la fórmula anterior sin incluir el peso.

Inverso de la concentración = 250ml/40mg = 6.25

0.005mg x 60min x 6.25 = 1,9ml/h

Os preguntareis para que queremos saber esto pero lo importante es saber hasta donde se puede subir el ritmo de la infusión.

Es muy frecuente que la inestabilidad hemodinámica del paciente nos obligue a modificar el ritmo de la infusión, en especial de drogas vasoactivas, para recuperar la estabilidad hemodinámica.

Captura de pantalla 2016-02-14 a las 0.03.45

 

Estas velocidades de infusión son para esta concentración de noradrenalina, en caso de ser otra concentración hay que recalcular el flujo de la infusión.

Bibliografía:

  1. Zabalegui Yárnoz A, Lombraña Mencia M. Administración de medicamentos y cálculo de dosis. Barcelona: Elsevier Masson; 2014.
  2. Somoza Hernández B, Cano González MV, Guerra López P. Farmacología en enfermería: casos clínicos. Madrid: Médica Panamericana; 2012.
  3. Gahart BL, Nazareno AR. Intravenous medications: a handbook for nurses and health professionals [Internet]. 2015 [cited 2015 Apr 9]. Available from: http://alltitles.ebrary.com/Doc?id=10925011
  4. Boyer MJ. Matemáticas para enfermeras: guía de bolsillo para cálculo de dosis y preparación de medicamentos. México: Editorial El Manual Moderno; 2013.

La llamada

dudas

De esta mujer no sabemos siquiera su nombre. La imagen fue tomada después de diecisiete horas de cirugía ininterrumpida. Tras ese tiempo en el que ha tenido que olvidar hasta las propias funciones de su cuerpo, sólo le alcanza fuerza para desplomarse en un taburete dentro del mismo quirófano. No se ha despojado aún del gorro quirúrgico. Su mirada permanece baja. Quizás antes de comenzar su guardia, dejó a su hijo con fiebre alta, o estaba preocupada porque ese día su hermana se quedó sin trabajo…

Apoya la cabeza en su puño en el gesto inequívoco del que piensa. O incluso del que duda. Porque hay una pregunta que queda siempre flotando en las salas de hospital, quirófanos, salas de parto… ¿Habrá merecido la pena?

La ausencia del hogar, el desgaste físico,  la necesidad de concentrarse durante horas, expone al personal de enfermería a una responsabilidad que queda muy por encima de la recompensa monetaria que recibirá al final de mes. ¿Cómo y por qué caminos llega entonces esta mujer a ser enfermera?

Siempre se ha dicho que la enfermería es una profesión de “vocación”. La etimología nos dice que esta palabra proviene del latín vocatio, que indica la acción de llamar y el hecho de ser llamado. Se trata por tanto de una atracción. Algo tan fuerte que te impulsa a ayudar a un semejante. Esto sucede así cuando el proyecto vital, la manera en que se elige estar en el mundo, implica cuidar al otro.

Las enfermeras sabemos bien, que la vida de un ser humano es irrepetible. Al nacer, cada uno de nosotros porta una dignidad y una gracia, que por humilde que se sea, nadie podrá sustituir. Lo que nos hace más humanos es, precisamente, vivir entre humanos. Esa es nuestra llamada, nuestra voluntad, nuestra elección.

Para ser fieles a nosotras mismas y dar un sentido a nuestra existencia, la enfermería pone al otro, al que está enfermo, en primera fila. Le da su conocimiento, su cuidado, su fuerza, su tiempo, incluso su propio ser. Este es su compromiso. Lo que hace sostenible que alguien luche por la vida de un desconocido como si fuera de la familia.

Ser enfermera supone aprender un arte de vivir, o como diría Fernando Savater, una ética. Al reconocer la humanidad de nuestros pacientes, de nuestros semejantes, estamos reconociendo la nuestra propia. Elegimos esta forma de vivir, libremente, porque es lo que da sentido a nuestra vida. Porque es irrepetible.

 

 

 


Lilo

perrito-870x300La placita del mercado, en Santurce, barrio antiguo de San Juan de Puerto Rico, congrega a todos los boricuas que busquen animación nocturna. En torno a la plaza que rodea al edificio del mercado, hay bares que ofertan música en vivo para los locales y los turistas, que como nosotros, andamos de la mano de nuestra familia portorriqueña, Marta y Javier, quienes nos están enseñando, de nuevo, el país.

El calor de un mes de abril, la risa de la gente, el cansancio de haber transitado de acá para allá, nos ha dejado a todos con ganas de refrescarnos, y eso hacemos: compramos en un puesto unos mojitos poco cargados y nos dirigimos a un banco junto a la pared del mercado. Desde allí, se divisa un panorama mestizo. Porque junto a los oriundos que bailan prodigiosamente al ritmo de salsa y cumbia, que se han compuesto para seducir y dejar impronta en la noche, se divisan no pocos indigentes que piden limosna, transitando entre los grupos de gente animada.

El botellón sofisticado se mezcla con la corte de los milagros. Un joven americano, muy degradado ya por la heroína, se nos acerca y nos ofrece libros, mientras su piel aparece perlada de sudor y su mirada profundamente azul nos traspasa. Marta nos dice que ese chico, ahora jorobado, hediondo y politoxicómano, era hace tan solo dos años un atractivo gringo que se granjeaba todas las miradas. Qué pena, pensamos todos. Como si no fuéramos a contemplar más degradación; como si el resto de la noche no tuviéramos contacto con la miseria; esa miseria que se agazapaba junto al San Juan divertido y despreocupado, esperando una limosna con la que remontar el día.

Seguimos bebiendo, comentando sobre nuestra vida de playa, de visita a islas paradisiacas, de comidas opíparas y como ahora, de bebidas azucaradas. Nuestra vida de piel bronceada y bien hidratada, de aceites esenciales. Nuestra vida de lo quiero y lo tengo… Cuando lo más surreal ocurre. Empujando el minúsculo carrito de una muñeca, entra en escena un vagabundo algo mayor y  algo ebrio. Se va acercando cuando comprobamos que el carrito está lleno de latas de cerveza vacías que parecen moverse solas. De pronto, el indigente mete la mano entre las latas, y de la nada, extrae un diminuto cachorro de piel muy negra. Se llama Azabache, nos dice. El perrito tiembla en las manos del hombre, que le ha colocado una cuerda a modo de correa y la agita con violencia para provocar la reacción del animal.

La pena nos recorre a todos cuando vemos el maltrato que sufre el cachorro. Marta, que es tan amante de los animales, no puede dejar de pedirle al desalmado que le preste el cachorro. Se lo coloca sobre su vestido de gasa amarillo flúor, aún a sabiendas de que se manchará. Le acaricia pero el perrito sigue temblando, presa del pánico. Miramos la escena con la incredulidad y la duda. ¿Qué hacer en semejante momento?

Pero Marta no. Le pregunta al hombre qué va a hacer con el perrito y cuánto quiere por él. El clochard, que todos sabemos ha extremado el maltrato al perro delante de nosotros para suscitar la transacción, duda. Le pide 20 dólares. Marta se niega y contraoferta con 5. El perro está débil y claramente ellos no necesitan otro en un hogar donde ya viven tres. Pero, ¿cómo dejar a su suerte a ese pobre que nos mira lastimoso, paradójicamente aterido en un ambiente de tanto calor? Marta nos pregunta con la mirada y todos asentimos: hay que rescatarlo.

Se produce la compra y, mientras Marta le quita a Azabache la soga que lleva al cuello, el hombre desaparece. Literalmente. Buscamos hacia dónde ha podido ir o qué reacción ha tenido tras conseguir dinero, pero no le encontramos: se lo ha comido la tierra en un movimiento más propio de un Ninja que de un alcohólico maltrataperros.

Marta propone rebautizarlo y yo sugiero Lilo, masculino de Lily, apodo de Manuela, la amiga que nos ha acompañado en el viaje y a quien cariñosamente hemos nombrado como a la hija del matrimonio gay de la serie Modern Family.

Y con Lilo nos marchamos para casa. Allí, a la luz de los focos, descubrimos que tiene multitud de garrapatas. Lo bañamos y le aplicamos un producto desinsectante. Al día siguiente, llevamos al cachorro al veterinario, para una revisión. Y nos confirman que está muy débil y que hay que tratarle, pero que sobrevivirá.

Pasadas unas semanas, Marta y Javier, tras una campaña en Facebook y el boca a boca, le han encontrado un hogar a Lilo, que a pesar de algunos problemas de salud, es un perro feliz con una dueña que le cuida.

A nuestra familia en San Juan no le ha importado la incomodidad, ni los problemas asociados a su cuidado, ni el dinero que han debido invertir para curarlo. Necesito tatuarme este ejemplo en la frente. Necesito pensar que todos podemos intervenir en algún momento, reaccionar e impedir que la injusticia se instale continuamente ante nuestros ojos. Creer que podemos mejorar lo que tenemos cerca, y con urgencia, abandonar la actitud de cinismo y abulia en la que me encuentro.

Voy buscando por las calles vagabundos que empujen carritos de bebé. Aún no he visto ninguno, pero os iré contando…


Bicarbonato, información útil para enfermería.

Los valores normales de bicarbonato (HCO3) en sangre están entre 24-28mmol/L

El uso de bicarbonato IV está indicado en acidosis metabólica, siendo esta severa cuando el PH< 7,15

Se consideran los valores normales de PH entre 7,35 – 7,45 .

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Bicarbonato 1/6 Molar.                                                                 Bicarbonato 1 Molar.

En la imagen superior podemos ver dos presentaciones 1/6M y 1M, su composición es la siguiente:

Osmolaridad (mOsmol/L)

Na (mEq/L)

HCO3 (mEq/L)

Bicarbonato 1M

2000

1000

1000

Bicarbonato 1/6M

334

167

167

La composición anterior está medida en litros y la presentación de la imagen son frascos de 250ml por lo que en un frasco de 250ml de bicarbonato 1M hay 250 mEq de bicarbonato y en un frasco de 250ml 1/6M hay 41,75 mEq de bicarbonato.

Hay que lavar generosamente la vía IV antes y después de su administración, la dosis habitual es de 2-5 mEq/Kg entre 4-8 horas, no debemos administrar más de 50mEq/h pudiendo infundir el frasco de 250ml de bicarbonato 1/6M en 1 hora.

La presentación 1/6M contiene 1,4gr de bicarbonato en cada 100ml = 1,4% = 14mg/ml

La presentación 1M contiene 8,4 gr de bicarbonato en cada 100ml = 8,4% = 85mg/ml

El bicarbonato es vesicante desde concentraciones >= 8,4% por lo que cuando administremos bicarbonato 1M tenemos que asegurarnos de tener un acceso venoso apropiado para evitar la extravasación.

En caso de extravasación:

  1. Parar la infusión inmediatamente y desconectar el sistema dejando la cánula en su lugar.
  2. Aspirar enérgicamente por la cánula (no lavar con suero).
  3. Iniciar el antídoto hialuronidasa.
  4. Retirar la cánula.
  5. Aplicar frío seco.
  6. Elevar la extremidad afectada.

Para aplicar hialuronidasa subcutánea debemos inyectar en 4-5 puntos separados alrededor del área de extravasación.

Cálculo del bicarbonato a reponer:

En caso de acidosis metabólica para calcular la cantidad de bicarbonato necesario para reponer se calcula con la siguiente fórmula:

Bicarbonato a reponer= (HCO3 deseado – HCO3 actual) x 0,5 x peso en Kg

Administración en Y:

Es estable con SSF y SG5%.

El bicarbonato es compatible con: esmolol, furosemida, heparina, insulina, morfina, nimodipino, nitroglicerina y urapidil.

El bicarbonato es incompatible con: amiodarona, cisatracurio, haloperidol, midazolam y tiopental.

A continuación dejo la lista completa de compatibilidad del bicarbonato según la base de datos UpToDate:

Incompatible con ácidos, sales ácidas, sales alcalinas, sales de calcio, catecolaminas y atropina.

Administración en Y:

Compatible: Aciclovir, amifostine, asparaginase, aztreonam, bivalirudin, caffeine citrate, cefepime, ceftriaxona, cladribine, cyclophosphamide, cytarabine, daunorubicin, dexametasona, dexmedetomidine, docetaxel, doripenem, doxorubicina, etoposido, famotidina, fentanilo, filgrastim, fludarabine, furosemida, nitrato de galio, gemcitabina, granisetron, heparina, ifosfamida, indomethacin, insulina (regular), levofloxacino, linezolid, melphalan, mesna, metilprednisolona, milrinone, morfina, oxaliplatino, paclitaxel, pancuronio, pemetrexed, piperacillin/tazobactam, CLK, propofol, remifentanilo, tacrolimus, telavancin, teniposide, thiotepa, tolazoline, vancomicina, vasopresina, vitamin B complex with C.

Incompatible: Alopurinol, amiodarona, anfotericina B cholesteryl sulfate complex, anidulafungin, cloruro cálcico, doxorubicina liposome, fenoldopam, hetastarch in lactate electrolyte injection (Hextend®), idarubicin, imipenem/cilastatin, inamrinone, leucovorin calcium, midazolam, nalbuphine, ondansetron, oxacillin, sargramostim, verapamilo, vincristina, vinorelbine.

Variable (consultar referencias específicas): Ciprofloxacino, cisatracurio, diltiazem, pantoprazol, TPN.

Bibliografía:

  • Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios.
  • UpToDate.
  • Ribas Nicolau B, Pérez Juan E, Amorós Cerdá SM, Arévalo Rubert MJ, Maqueda Palau M. Compatibilidad física del bicarbonato sódico con fármacos de uso frecuente en la unidad de cuidados intensivos. Enfermería Intensiva. abril de 2011;22(2):78-82.

NAVIDAD,DULCE NAVIDAD

Christmas Dinner

Christmas Dinner

La Navidad es una de las fiestas más importantes del Cristianismo, donde a lo largo de los años se ha ido mezclando su carácter religioso con la tradición de la convivencia familiar. Es celebrada tanto por cristianos como por la gente no creyente.

Nosotros, como profesionales de la Sanidad, celebramos «Estas Fiestas» de una manera muy peculiar…Me tendría que remontar a la época de estudiante, en la que estabas deseando que llegara estas fiestas para disfrutar de las vacaciones y quedar con los amigos, hartarnos de comilonas, ver a la familia,reencontrarte con aquellos que no ves  desde hace mucho tiempo… ¡Recordar el anuncio de «El Almendro»  que  llega  a casa por Navidad!. Pero, cuando por fin trabajas y llegan estos días, NI QUEDAS CON AMIGOS, ¡te toca trabajar!, NI VES A LA FAMILIA, ¡te toca trabajar!  Y para colmo, eres una de las personas afortunadas para trabajar una  «noche clave»… (llamamos noches claves a Nochebuena y Nochevieja). Es una amarga sorpresa, pero… a alguien le tiene que  tocar «currar» ,como si de un día normal se tratara, no hay diferencia…trabajamos igual.

Siempre empezamos unos días antes de estas fechas comprando los décimos de la lotería, es ahí  cuando ya nos damos cuenta que la Navidad está por llegar y falta poquito. El lema de este año es «Compartir» , pero a nosotros no hace falta que nos digan eso de compartir ; llevamos ya algunos años que para no gastarnos mucho dinerito en este tradicional juego y por aquello de «y si le toca a este y a mi no», compartimos lotería  de varios servicios del hospital con los compañeros y ..¡¡Veréis el día 22 como nos  toque!!….Saldremos en la tele y todo.

La mayoría de las ciudades  colocan alumbrados  llamativos y coloridos, principalmente en las calles más céntricas y concurridas, además de árboles de Navidad y Belenes, que hacen florecer ese  «Espíritu « de la Navidad,  el cuál en mi Unidad no existe. En cuanto alguien coloca un adorno, una luz u algo similar, aparece la mano de un ser superior y desaparece todo. Yo, recuerdo en otros hospitales y en otros servicios de este hospital, donde se engalanan las paredes con cintas y algún detallito navideño, para que los pacientes puedan ver que es una época diferente y que nos alegra poder pasarla con ellos, ya que no les queda más remedio que estar ingresados, y a nosotros trabajar. Pues bien, eso aquí no ocurre y solo ponemos un árbol, ¡que para colmo!, este año ni iluminación tiene…qué le vamos a hacer!!. Aunque,  como somos grandes profesionales, no necesitamos luces para demostrar que nuestro espíritu está en el interior de nosotros y nos acompaña allá donde vamos…

Como he dicho antes , esas noches alguien las tiene que trabajar y como personas civilizadas que somos ,realizamos un rotatorio ya instaurado desde los principios de esta profesión,para que todo el personal vaya rotando y trabaje esas noches; algunos con más reticencia que otros , aunque siempre hay un espabilado que se quiere librar como sea…Ahí sale la vena esa egoísta que tenemos todos y que  no cuadra con el espíritu de la navidad de paz, amor y fraternidad…y lo consigue ,oye,  ¡vaya si lo consigue!…¿CÓMO? os preguntaréis…

Pues muy sencillo, siempre hay y habrá un suplente que realice esa noche, porque para muchas personas, los suplentes son los que deben trabajar todo y  piensan que por ser suplentes, no tienen derecho a su vida  familiar ni social…No queda tan lejos la época en la que fuimos suplentes , Y…. ¡¡¡BINGO!!! Me libro de la noche…¡¡Oh!! Vaya!!  Que a mi no me toca, ¡que suerte la mía!, este año me toca hacer Nochebuena.Esa noche en la cuál la mayoría de las personas están con su familia, nosotros, cuidamos a los pacientes y pasamos la noche con «nuestra otra familia»…porque en realidad es así , nuestra otra familia. Y pasamos más horas trabajando  con ellos que  con los nuestros. Esa noche me toca a mí.

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Una vez realizadas las planillas y sabiendo con quien trabajas, llega el momento de repartir la cena , me explico …tradicionalmente se come pavo, bacalao, cerdo, cordero y otros platos, dependiendo del lugar en que se celebre o las tradiciones de la familia.En los últimos años, nosotros, lo que hacemos primero es crear un grupo en whasapp para decidir si cocinamos o si lo compramos  los platos ya elaborados, una vez decidido esto, nos vamos asignando lo que cocinaremos o llevaremos cada uno….«yo traigo los langostinos, venga vale y yo unos aperitivos, lo hacemos en plan picoteo verdad?,¡Quien trae el mantel y los turrones ?…Eh, que yo traigo el postre» y así vamos confeccionando la cena tan esperada y  todo esto se hace, pensando en que  esa noche  va a ser tranquila, pero todavía no sabemos si vamos a poder disfrutar de la cena a una hora decente para nosotros (las 24 o la 1) o casi de madrugada, dependiendo de cómo estén los enfermos, porque para nosotros: lo primero son los pacientes. En Nochevieja ,pasa tres cuarto de lo mismo, con la salvedad de que a alguien le toca llevar las uvas ¡Claro!…

Con todo esto quería que supierais que tanto Auxiliares (Técnicos en Cuidados de Enfermería),Enfermeros y Enfermeras, Médicos Adjuntos y Médicos Residentes de una Unidad de Servicios Especiales, somos personas que tienen maridos, esposas, hijas,hijos, padres,hermanos, nietos….Que en estas fechas tan especiales, nos cuesta mucho más dejar el hogar para salir a trabajar, a cuidar y velar de esos pacientes, que por diferentes circunstancias están ingresados y necesitan de nuestros esmerados cuidados y por ello,puedo decir que:  «Me llena de orgullo y satisfacción « ser como ese vigilante de seguridad de la fábrica de maniquíes, ¡sí!, como el anuncio de la lotería de Navidad, con la diferencia de que mis maniquíes tienen sentimientos y emociones que se manifiestan con mayor intensidad y terminan contagiando a todo el personal.

¡¡FELIZ NAVIDAD!!

 

 


Ser persona migrante en un país en desarrollo: enfermera en Benín.

Hace unas semanas me pidieron que escribiera unas líneas sobre mi experiencia como persona que ha marchado fuera de su país un tiempo a «buscarse la vida»: ser una persona migrante. Aquí os dejo parte del relato que escribí para otra revista. Las experiencias son muy diferentes en función de las circunstancias y motivos que te obligan a moverte,así como la situación personal y el país de destino, esta es una historia más…

Moverse de un país a otro implica estar abierto a adaptarse, si no, no te vayas. Sea el motivo que sea el que nos empuje a tomar una decisión así , creo que esta es una premisa a tener en cuenta para hacer  la experiencia lo menos traumática posible. Hoy, os escribo como enfermera migrante que estuvo un año en un país en desarrollo vinculada a la Sociedad de Misiones Africanas [1] (SMA) en un proyecto misionero.

DESTINO: Norte de Benín, país de África subsahariana,  zona rural de sabana cerca de Níger.  Con un clima tropical árido y  temperaturas elevadas, no posee grandes riquezas naturales.

MOTIVOS :  Compromiso con la SMA para trabajar en un hospital para gente sin recursos .  No me vi obligada a ello por razones de trabajo, familiares, conflictos bélicos o políticos : me fui porque quise y pude elegir. Muchos otros no pueden decir lo mismo, soy consciente de ello.

ESTANCIA: Me marché con mucha ilusión, aun sabiendo que dejas familia, amigos, trabajo,… Lo primero que choca son los olores, los colores, las casas , las comidas. Antes de irme, había estudiado  sobre cultura, tradición ,salud, enfermedad, etc., del país y las gentes donde iba a vivir, pero aún así, al inicio  te das cuenta de lo poco que sabes. Empezar a mezclarte con las personas , trabajar codo con codo, te hace partícipe de la vida de los demás y a ellos de la tuya. Día tras día te vas  familiarizando con  las «formas» del otro.

Al llegar  hay que aprender a vivir  con el hecho de  «ser blanca». En el norte no es muy común ver blancos cuando vas de visita a los pueblos para trabajar. Resulta curioso que  los niños pequeños se asusten  al verte, poco a poco se van acostumbrando, pero asombra la primera vez que te ocurre, porque uno piensa que no puede atemorizar a nadie sólo por su color de piel. Recuerdo la conversación con un compañero del hospital, que se iba los viernes a ver a la familia en moto. Realizaba un viaje  de dos horas  sin casco y sin gorra, en ocasiones a temperaturas de 35-40ºC . Y yo le «reñía » porque podía coger una insolación o sufrir un golpe de calor. Riéndose me contestaba: «Piluqui ( era mi apodo) ¿has visto mi pelo?, ¿has tocado mi piel? …yo no soy como tú. Estoy hecho para aguantar esto». Aunque sigo pensando que era demasiado calor para cualquiera, creo que tiene toda la razón, hay aspectos que por el contexto, naturaleza y estilo de vida nos hacen  diferentes, hay que asumirlo para establecer una relación normal, pero sabiendo que en dignidad, derechos y obligaciones somos iguales.

En el hospital. Foto: @mipili75

Foto 1 : en el hospital. @mipili75 .

Me marché con 13 años de experiencia  como enfermera, pero  tuve que aprender de nuevo. Ni el manejo del paciente  ni  los recursos disponibles son iguales. Ejemplos básicos:  aquí si curas una herida y haces un vendaje lo acabas con esparadrapo , allí  el calor lo despega ,  acábalo con un nudo y será mucho más práctico;  enfermedades que aquí son crónicas , como la diabetes, allí no hay medio de atenderlas, la insulina es cara y nuestro hospital no tenía recursos para darlo, por lo que se reduce mucho la esperanza de vida de quien la padece. Y así, podría enumerar muchos más ejemplos.

Otro aspecto del que hablar es el concepto de tiempo. Al comienzo , me preguntaba  por qué hacíamos una pausa en el trabajo para comer y dormir una hora de siesta (mejor hacer todo de continuo y salir antes ). Con los meses, entendí  que el calor agota a la persona en sentido «literal», se lleva gran parte de tu vitalidad ,de tus fuerzas, y ,  en el hospital, salvo que tuvieras guardia, comprendo  que  el resto del personal descansara de 12h a 14h para continuar por la tarde.

Los taxis: un transporte diferente. Uno piensa que cuando viaja en taxi sale a una hora y llega a otra. Gran error, la realidad es que tu llegas a la parada del taxi, cuentan contigo para una plaza, pero no sabes a qué hora saldrás, porque hasta que no se llene, el coche no sale ( puedes esperar horas). Y, ¿cuántos viajeros iréis? piensa que donde tú no meterías más de cinco, allí pueden coger hasta once, y resulta interesante la relación que estableces. Por no hablaros de la mercancia que se puede llevar en el taxi (foto 2).

Taxi

Foto 2 : Taxi. @mipili75

Podría hablaros de las comidas, los sabores, esa pasta de ñame que mezclada con la salsa está para chuparse los dedos , el yogur congelado en los puestos de la calle, la carne seca,…, todo esto como pequeños placeres que algunos días me permitía. Al principio ,al ir a los pueblos ( hacíamos promoción de la mujer y formación con ellas), te cuesta entender el concepto de limpieza, cuando todo está lleno de polvo. Con el paso de los meses, eres capaz de diferenciar lo limpio y ordenado del caos y la suciedad en las casas, a pesar de que la arena y el polvo estén presentes todo el año por la región geográfica en la que me hallaba.

En el trabajo en los pueblos, la acogida era con una canción, oración, o gesto de bienvenida (foto 3). Todo por recibir al que viene de la mejor forma posible y aunque la forma pueda asombrar en un primer momento, acabas sintiéndote a gusto. Este trabajo «de campo» con las mujeres me ayudó a comprender el papel de la mujer en la familia, su importancia en la salud de la población como agente de salud.

trabajo en los pueblos

Foto 3: acogida en uno de los pueblos. @mipili75

Esto es fácil de entender si tenemos en cuenta que:

  • la mujer va a ser la encargada de hacer  la comida, por tanto, de que los alimentos estén en buenas condiciones, y de que sean adecuados como nutrientes ( cuando las condiciones y recursos lo permitan)
  • ella va en busca del agua, luego es la responsable de que se encuentre en condiciones adecuadas de ingesta
  • la mujer recoge la casa, el «patio», así vemos cómo la  limpieza e higiene de la comida, casa y poblado va a depender de ella
  • responsable de los niños, se ocupará de que estos se alimenten bien, se laven,descansen,… es decir, puedan llevar una vida sana.

El encuentro, trabajo y oración con personas de otros credos ( musulmanes y de religión tradicional) son otros recuerdos gratos que me traje. La realidad diaria te permite conocer en una misma familia personas de distinto credo conviviendo y respetándose. Ejemplo de ello era el hospital donde estuve inserta, hospital de la iglesia ,donde el médico y el director del centro eran musulmanes, así como otro personal era cristiano y otro de religión tradicional. El diálogo, el respeto y la convivencia de una manera sencilla eran palpables y en los tiempos que corren creo que merece la pena, al menos,  mencionarlo.

En resumen, puedo decir que fue una experiencia positiva aunque estando lejos te das cuenta, o al menos ese fue mi caso, de lo dentro que llevas a la gente con la que has crecido, los sabores que han construido tu paladar, y la sociedad donde has nacido. Esto que me identifica como persona e individuo, pero no merma la capacidad de adaptación allí donde uno decida marchar.

Actualmente me toca conocer la realidad desde el otro lado, la realidad de los que «vienen». Colaboro con Karibu [2] en el dispensario médico que tiene en Madrid para la atención sanitaria de personas africanas que arriban a España. Haber sido persona migrante me ha ayudado a abrir  los ojos para tratar de entender al que llega , cuando se encuentra indefenso ante situaciones que le toca vivir en una sociedad que no es la suya. «Forasteros» lo hemos sido todos cuando  salimos fuera.

Estas son nuevas experiencias, pero esas quedan para otro día.

Un saludo.

Webs de interés:

[1] www.misionesafricanas.org

[2] www.asociacionkaribu.org


Mis tres esencias

Hace ya algún tiempo me encontré con una autora estadounidense que no había conocido en mi proceso formativo, Jena Watson. Cayó un día en mi mesa y se quedó ahí hasta el día de hoy. Tranquila, paciente, esperando ese espacio de tiempo en el que pudiera ser leída. Y esperó mucho tiempo. Como traída desde ese pasado anacrónico, por diferentes razones volvió a saltar a mi mesa desde el cajón donde dormía. La desperté del silencio y del sueño de la espera para leerla y apreciarla.

El motivo (siempre hay un motivo) fue una conversación de diez minutos de un curso de formación en cuidados paliativos donde se nos cuestionaban las motivaciones, razones, referentes, valores, y actitudes que pudiéramos tener cada uno de nosotros en relación a esta área de trabajo.

Tenemos mucha tendencia a mirar al futuro. Nos hinchamos como pavos cuando nos engolamos con futuribles. Somos expertos en técnicas, conocimientos, formaciones de las más variadas índoles, sueños, creencias, aspavientos, rumores, tendencias,….. pero después de tantos años sigo echando de menos “ser experto en esencias”.

La esencia es la base, el arraigo, la raíz que me une al suelo y me permite crecer. La esencia siempre es pequeña porque su capacidad es la del desarrollo, la de la iniciativa, la de la proacción,… la del rumor convertido en conversación. La esencia siempre nutre, pero en muy pocas ocasiones la concedemos atención pensando que siempre estará ahí. El problema surge cuando hemos expandido tanto nuestras ramas que el tronco no puede, no sabe o no quiere soportarlas.

Es ahí donde surge, Watson y su Teoría del “cuidado transpersonal”.

En mi trabajo cotidiano, antes y después, siempre me he planteado si existen los cuidados éticos al individuo o si es un uso ético de los cuidados lo que hace que nos movamos de un lado a otro. Qué es lo que condiciona cuáles y cuántos de esos cuidados son necesarios; cuáles y cuántos cuidados no son necesarios; qué es lo que me hace priorizar qué y cuántos cuidados se han de administrar y durante cuánto tiempo. …..

Otro aspecto que me resulta siempre curioso por sí mismo es el hecho de que los cuidados, como aspecto base de la relación con el paciente/persona, han de ser administrados con la normalidad más estrecha del contacto humano. Cuidamos porque somos personas y porque, por el mero hecho de ser persona, debemos ser cuidados (es ahí donde entra mi concepto de profesión). Ahora bien, convertir los cuidados en algo anormal, realmente proporciona esencia a los mismos o los excluye de esa pirámide de prioridades que es la profesión enfermera?. Supongo que como todo en la vida, nos movemos en la dicotomía.

Mi tercera esencia profesional, se basa en la actual tendencia hacia la humanización de los cuidados. Este aspecto me resulta tan en las antípodas de la finalidad y raíz de mi profesión …!!!! Cómo puedo establecer cuidados si no parto del concepto de la humanización de los mismos? Qué le aporta de novedoso a mis cuidados el hecho de que yo los tilde de “humanos”?

Según Watson, la enfermería está centrada en relaciones de cuidado transpersonales. La enfermería es un arte cuando la enfermera experimenta y comprende los sentimientos del otro, es capaz de detectar y sentir estos sentimientos, y a su vez, es capaz de expresarlos, de forma semejante que la otra persona los experimenta”.

El cuidado se basa en una perspectiva fenomenológica según la cual el cuidado es un fenómeno impregnado de subjetividad que conduce a proecuparse por las experiencias de la otra persona.

Watson reconoce que el cuidar es parte fundamental del ser y es el acto más primitivo que un ser humano realiza para, efectivamente, llegar a ser. Este ser es un ser en relación a otro que lo invoca. Esto es la base fundadora del cuidado en general y, a la vez, del cuidado profesional propio de la enfermería. Este cuidado profesional es estructurado, formalizado y destinado a satisfacer las necesidades del ser humano con el propósito de promover, mantener y recuperar la salud.

Algunos conceptos importantes en la Teoría de Watson son:

Interacción enfermera-paciente: define al cuidado como un proceso entre dos personas con una dimensión propia y personal, en el que se involucran los valores, conocimientos, voluntad, y compromisos en la acción de cuidar.  Aquí la enfermería elabora un concepto de idea moral como la preservación de la dignidad humana.

  1. Campo fenomenológico: corresponde a la persona en su totalidad de experiencias de vida humana, abarcando sentimientos,  sensaciones, pensamientos, creencias, objetivos, percepciones. Es decir,  es todo lo que construye la historia de vida del individuo tanto en el pasado, presente y futuro.
  2. Relación transpersonal de cuidado: para comprender dicho proceso debemos tener en claro dos conceptos básicos, estos son:

-Transpersonal: ir más allá del propio ego, lo que  permite alcanzar conexiones espirituales más profundas en la promoción de la comodidad y la curación del paciente
-Cuidado transpersonal: intenta conectarse y abrazar el espíritu o el alma de los demás a través de los procesos de cuidados y de tratamientos y estar en relación auténtica, en el momento.

La relación entre estos dos conceptos se da por la caracterización de  una clase especial de cuidado humano que depende de: el compromiso moral de la enfermera de proteger y realzar la dignidad humana así como el más profundo y/o más alto yo, mas allá de la situación de salud.

  1. Momento de cuidado: es una ocasión en la que la enfermera y otra persona se conectan para el cuidado humano con un punto de contacto en un tiempo y espacio determinado. Tiene la habilidad de expandir la capacidad humana.

Los supuestos de la teoría transpersonal de Jean Watson son los siguientes:

. El cuidado sólo puede ser demostrado y practicado efectivamente en una relación interpersonal.. Son contextuales a la época en la que se desarrollan, al lugar geográfico, a las necesidades de la población o de un individuo en particular y a los elementos con los que se cuenta por lo que necesitan de un conocimiento del ámbito y del ambiente en el que la persona se desarrolla.

. El cuidado está condicionado a factores de cuidados y asistenciales destinados a satisfacer las necesidades humanas.

. El cuidado efectivo promueve la salud y el crecimiento personal y familiar.

. Las respuestas del cuidado aceptan a las personas no sólo por lo que son sino por lo que pueden llegar a ser.
. Un entorno de cuidado posibilita el desarrollo de aptitudes a la vez que permite a la persona elegir la mejor opción para sí misma en un momento dado. Un ambiente de cuidado es aquel que promueve el desarrollo del potencial del individuo permitiéndole elegir la mejor opción en un momento preciso.

. El cuidado genera más salud que curación. El cuidado integra el conocimiento biofísico y el de la conducta humana para producir o promover la salud y para ofrecer ayuda a quienes están enfermos. Por lo tanto, la ciencia del cuidado es complementaria de la ciencia de la curación.

. La práctica del cuidado es central en la enfermería.

Como podéis imaginaros, las tres esencias de las que os hablaba al principio (cuidados éticos, normalidad de los cuidados y humanización de los cuidados) no son algo nuevo que descubrir. Algunas teóricas de nuestra profesión ya habían hablado de ello por lo que para mirar al futuro y soñar con futuribles sí que creo que es necesario regresar al pasado, cargar la mochila y descubrir el camino de baldosas amarillas. Y como siempre, comenzar a andar.

 

Bibliografía:

http://teoriasdeenfermeriauns.blogspot.com.es/2012/06/jean-watson.html

http://encolombia.com/medicina/revistas-medicas/enfermeria/ve-104/trabajoslibres1/

Guillaumet i Olives M, Fargues i García I, Subirana I Casacuberta M, Erosi Serra M. Teoría del Cuidado humano. Un café con Watson. Metas de Enfermería. Marzo 2005; 8(2):25-32

Urra M. E, Jana A. A, García V. M. Algunos aspectos esenciales del pensamiento de Jean Watson y su teoría de cuidados transpersonales. Ciencia y Enfermería 2011; (3):11-22.

Cristiane do Nascimento J, Lorenzini Erdmann A. Comprender las dimensiones de los cuidados intensivos: la Teoría del Cuidado Transpersonal y complejo. Rev. Latino-am Enfermagem 2009 marzo-abril;17(2)


Con paso firme: la vejez como oportunidad

Elderly Nurse

Ahí la tienen,  una enfermera veterana. Pero de las de veras. El paso de los años y la actividad intensa enflaquecieron su cuerpo. Por eso el uniforme que viste ha quedado como  prenda de talla equivocada. El cuello flaco asoma, bailando en el cuello tieso del uniforme.

La enfermera adelanta un pie en perfecta coordinación con el brazo contrario, para dar impulso a sus pasos firmes. Es una mujer que no puede perder el tiempo, porque ya no sobra.  Es lo que tiene la vejez. Ha llegado de manera sencilla, viviendo, sin necesidad de más. Y sin llamar la atención de nadie.

Nos han educado y vivimos en una sociedad donde se hace imprescindible contar con todas nuestras facultades en plenitud. Ahora incluso, nuestra imagen externa debe obedecer también este mandato. Ser para siempre jóvenes, tersos, esbeltos, es un requisito para que una persona mantenga elevada su autoestima.  Si se siguen estos preceptos culturales, es porque existe una lectura totalmente negativa de la vejez. Se ve como una etapa de límites que no queda más remedio que aceptar. Un momento de máxima melancolía. Las causas posibles de este pensamiento son dos. Nos hacemos conscientes de que el camino proyectado no ha podido ser realizado y de algo aún peor, que ya no queda tiempo suficiente para lograrlo. Sin embargo, sigue siendo un período donde es esencial hacer planes, tener proyectos. Con la esperanza de cumplir incluso con aquellos que se imaginaron cuando éramos más jóvenes.

Si tuviera la posibilidad de elegir, querría ser como esta enfermera veterana.  Quizás  a esa edad, viva con menos capacidad económica y  con la salud algo mermada. A lo mejor algún compañero de vida se habrá perdido por el camino. Pero todavía seguiría en pie, preparada para lo que llegara a continuación.

El envejecimiento tiene que ser también un acto de rebelión frente al tiempo. Un proceso que tiene que empezar mucho antes de su llegada, preparándonos para conseguir ser (por dentro y por fuera), ese anciano al que aspiramos llegar a ser. Puede parecer un proyecto muy ambicioso.  Pero tendríamos a cambio del esfuerzo, mucho que ganar. Al envejecer, no sólo perdemos, también ganamos: ternura, proximidad, lucidez, serenidad…Todos estos valores pueden hacer de nosotras, mejores enfermeras.

Por esta razón, miremos a nuestras enfermeras, las veteranas. Muchos tenemos la inmensa  suerte de haber trabajado o trabajar todavía con ellas. Tienen una capacidad de enseñanza y consejo extraordinaria. Son la verdadera fuente de aprendizaje. A cambio les debemos afecto, cuidado y estima. Esa es la obligación de las generaciones más jóvenes. La mía.

Las enfermeras veteranas son las que han conseguido llegar hasta aquí, erguidas. Son lo mismo que han sido desde que eran jóvenes.  Las canas y las arrugas no han desdibujado los frutos de su prestigio. Sino que son signo de mérito de aquellas que se prepararon para ser mejores en su etapa final. Con paso firme.

 

 


Glucocorticoides, información útil para enfermería.

Los glucocorticoides junto con los mineralcorticoides y andrógenos forman los corticosteroides.

Los glucocorticoides actúan sobre el metabolismo aumentando los depósitos de glucógeno y reducen la penetración de la glucosa en las células, todo esto produce un aumento de glucógeno hepático, aumento de la glucemia y glucosuria.

Al favorecer la gluconeogénesis y por consumo de las proteínas musculares y óseas causan atrofia muscular y osteoporosis, si bien estos efectos son más propios de un tratamiento a largo plazo. Los corticoides favorecen la redistribución de grasa corporal acumulándose en la parte superior y reduciéndolo en la inferior, dando lugar a cara de luna llena, joroba grasa y borramiento de fosas supraclaviculares.

El efecto antiinflamatorio se debe a que inhiben la liberación de sustancias vasoactivas como la histamina, además de la migración y adherencia de neutrófilos al foco inflamatorio, lo que a su vez inhibe la migración de macrófagos.

Otro efecto sobre el sistema inmune es que aumenta los neutrófilos en sangre, disminuye los linfocitos, eosinófilos, monocitos y basófilos circulantes lo que disminuye la respuesta de los linfocitos a agentes mitógenos favoreciendo la aparición de infecciones bacterianas, virales y fúngicas.

No se debe interrumpir bruscamente el tratamiento cuando se usan dosis elevadas o tratamientos prolongados, debido al alto riesgo de sufrir insuficiencia suprarrenal aguda (hipotensión, debilidad, fatiga, anorexia, pérdida de peso, vómitos, diarrea, dolor abdominal, letargia, confusión y ocasionalmente fiebre), con peligro para la vida del paciente.

Los glucocorticoides se clasifican en función de la duración de su efecto.

  • La dexametasona y la betametasona tienen una semivida prolongada de 30-60 horas.
  • La prednisolona y metilprednisolona tiene una semivida intermedia de 12-36 horas.
  • La hidrocortisona tiene una semivida corta <12 horas.

Dexametasona:

Se presenta en ampolla de 4mg/1ml y 40mg/5ml de solución inyectable. Es 7 veces más potente que la prednisolona y 20-30 veces más potente que la hidrocortisona.

Está indicado como tratamiento para reacciones alérgicas, para reducir edema cerebral o edema en la vía aérea gracias a su efecto antiinflamatorio. Otros usos son como antiemético por vómitos inducidos por quimioterapia entre muchos otros.

Se puede administrar sin diluir o diluido en SSF/SG5% y se puede administrar en Y con: cisatracurio, fentanilo, heparina, morfina, ondansetron, CLK, propofol, remifentanilo, bicarbonato.

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       Presentación 40mg/5ml

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 Presentación 4mg/1ml

Metilprednisolona:

Se presenta en ampollas con un vial de polvo para reconstituir y otro vial con a.p.i. En el mercado podemos encontrar preparaciones con 8 mg, 20 mg, 40 mg y 250 mg bajo el nombre comercial de Urbason® .

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También podemos encontrar el mismo principio activo bajo el nombre comercial Solu-Moderín® con concentraciones de 40 mg, 125 mg, 500 mg y 1gr de metilprednisolona.

 

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  • Las dosis entre 10 y 40 mg se pueden administrar de forma IV directa en bolo de pocos minutos.
  • Dosis de hasta 125 mg se pueden administrar en bolo directo entre 3-15 minutos.
  • Dosis de 250 mg o superiores deben administrarse en infusión entre 15-30 minutos.
  • Dosis superiores a 500 mg deben administrarse en infusión con una duración de 30 minutos o más.

La administración demasiado rápida de dosis altas (500mg en menos de 10 minutos) puede producir hipotensión, arritmia y muerte súbita.

En cuanto a la dilución cada 1gr de metilprednisolona debe diluirme en al menos 16ml de SSF, SG5%.

La dilución se debe administrar antes de las 48 horas.

Los fabricantes especifican que no debe mezclarse con otros medicamentos, otras fuentes indican que puede administrarse en Y con: Aciclovir, amiodarona, cefepime, ceftazidima, dopamina, heparina, linezolid, metronidazol, midazolam, morfina y remifentanilo.

Hidrocortisona (Actocortina®):

Está indicado en el tratamiento urgente de anafilaxia, angioedema o crisis asmática severa. Se presenta en ampollas con polvo para reconstituir, en el mercado se puede encontrar ampollas de 100mg, 500mg y 1gr. En la imagen se muestra un vial de 100mg.

 

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Su administración IV se puede hacer con SSF/SG5% y con una concentración de entre 0,1-1mg/ml por lo que para administrar 100mg de hidrocortisona debemos diluirlo al menos en 100ml, pudiendo administrarse entre 30 segundos y 1 minuto. Para dosis superiores a 500mg debemos administrarlo en al menos 10 minutos.

Bibliografía:

  1. Castells Molina S, Hernández Pérez M. Farmacología en enfermería. Madrid, [etc.]: Elsevier; 2007.
  2. Villa Alcazar LF. Medimecum: guía de terapia farmacológica. [S.l.]: Adis; 2014.
  3. Gahart BL, Nazareno AR. 2015 intravenous medications: a handbook for nurses and health professionals [Internet]. 2015 [cited 2015 Aug 16]. Available from: https://www.clinicalkey.com/dura/browse/bookChapter/3-s2.0-C20100686779